EL CAMPO POPULAR Y SUS DESAFIOS | *Por Joaquín Massa.

21 de Noviembre - La Argentina ingresa en lo que serán los 4 años más difíciles que nos tocara transitar desde el regreso a la Democracia a la fecha.

Ajuste, represión, pérdida de derechos, privatizaciones y relaciones carnales, serán moneda corriente durante el gobierno de Javier Milei.

Y esto lo digo sin hacer futurología o ser prejuicioso. Simplemente me amparo en las distintas declaraciones que realizo Javier Milei a lo largo de su campaña y sus primeras 24 horas como Presidente electo, y en la plataforma de campaña de La Libertad Avanza.

Con lo cual, en términos de políticas de estado, estamos ante un gobierno de (ultra) derecha que avanzara con aún más fuerza que el Gobierno Mauricio Macri e inclusive de Carlos Menem.

24 horas como Presidente electo, una agenda que mete miedo

En sus primeras 24hs como Presidente Electo, Milei ya hablo de vender YPF, privatizar TELAM, la TV y Radio Pública, entre otras cosas.

Ratifico que su alineamiento con Estados Unidos e Israel, y el gobierno de Gran Bretaña felicito “al presidente electo” por haber afirmado que el tema Malvinas es un tema “superado”.

Milei no llego por arte de magia, ni  por casualidad. Tampoco llego únicamente por “una buena estrategia” de la derecha y los grupos de poder.

Nosotros, el Campo Popular tenderemos que hacer nuestra fuerte auto-crítica interna. Si, nosotros también tenemos nuestra cuota de culpa.

Pero no será hoy, ni en estas líneas donde emitiré mi opinión sobre que no hicimos en estos últimos 20 años. Creo que debemos hacerlas puertas adentro, de forma sincera y con honestidad militante.

La Argentina de Milei

La Argentina de Javier Milei, será una Argentina de ajuste. Donde nos encaminamos hacia una dolarización que a medida que vaya pasando el tiempo cada vez dejara cada vez mas gente fuera del sistema, donde la gente  ira cayendo del mapa y donde el estado tendrá menos empresas públicas.

YPF, Telam, Radio Nacional, TVP serán las primeras “joyas de la familia” con la que se intentara pagar estos 4 años de fiesta libertaria.

Achicamiento del Estado, y con ella despidos masivos. Perdidas de derechos, apertura de importaciones y entrega de la Industria nacional.

Relaciones carnales con EEUU, y pérdida de la soberanía nacional. Seremos nuevamente una colonia, y volveremos a ser el patio trasero del Imperialismo Yanki.

¿Paritarias libres? Afuera. ¿Salud pública de calidad? Afuera. ¿La clase media? Sera un simple recuerdo que le contaremos a nuestros hijos sobre una Argentina que ya no existe.

¿Qué va a pasar en el cruce de las avenidas “Ajuste” y “Resistencia Popular”? Conflicto, caos; y sera el aparato represivo estatal el que intentara “educar” a estos “insubordinados”, así sea con algunos “excesos”.

El Peronismo, la luz en tiempos de oscuridad

Y en este contexto es que el Peronismo debe resurgir. Si, el Peronismo, con su historia, con sus dogmas, con su militancia.

Es el Peronismo quien deberá encabezar la reorganización del Campo Nacional y Popular, sumando a todos aquellos sectores que desean defender el interés del pueblo humilde y trabajador. Deberán ser lo Sindicatos y sus trabajadores la columna vertebral de la resistencia de los próximos 4 años.

Serán los Municipios y Gobernaciones gobernados por el Peronismo quienes –seguramente-suplantaran la ausencia del Estado Nacional, intentando (como puedan, y con los pocos recursos con los que cuentan) acompañar a todos aquellos a los que el Gobierno de Milei olvidara y dejara a su suerte. Cómo sucedió entre el 2015-2019.

Y es por eso que los Intendentes y Gobernadores también tendrán un rol imprescindible a la hora de reconstruir la herramienta política y electoral que nos permita ser gobierno dentro de 4 años.

Porque es la con el eje puesto en la política por donde debemos encarar la resistencia y la reorganización del Campo Nacional y Popular.

Acá no habrá mesías ni iluminados, el guante blanco que elige desde el más allá con calefacción y heladera llena fracaso. Ahora es tiempo de arremangarse y caminar, militar y gestionar. Pero fundamentalmente de escuchar y abrazar.

Todos estamos en el llano, nadie es más que nadie. Pero debemos respetar y acompañar a los compañeros y compañeras con responsabilidad de gestión. No hay tiempo para mezquindades ni aventuras personales.

La Patria y el pueblo está en peligro. Ojala estemos a la altura.